Lizeth es la fundadora del Club de las Mujeres que Viajan Solas por el Mundo, al que ya pertenecen más de 10.000 viajeras.
¿Cuantas veces nos han dicho que las mujeres no podemos viajar solas porque corremos el riesgo de que nos roben, nos violen o nos asesinen?, ¿cuántas veces hemos escuchado que hay que viajar con un acompañante, preferiblemente hombre, para que nos cuide? ¿cuántas veces se ha dicho “ella se buscó lo que le pasó” por ir andando sola? Todos y cada uno de los mitos que hay alrededor de mujeres viajeras pasaron por los oídos de Lizeth Pana Van Grieken, una mujer que rompió barreras y se lanzó a descubrir nuevas culturas y recorrer nuevos caminos viajando.
Lizeth nació en la Guajira y pertenece a la cultura Wayuu. Desde que era niña tuvo contacto con extranjeros que brindaban ayuda social a su comunidad y quedó cautivada con los acentos e historias de viajes que ellos le contaban. Estudió el bachillerato en Riohacha y luego, obtuvo el título de ingeniera civil en Barranquilla. Una vez graduada, empezó su vida laboral, pero pronto se dio cuenta de que trabajar metida en cuatro paredes y bajo presión, no era lo suyo. Al renunciar supo que lo que quería era recorrer esos lugares que de niña se había imaginado conocer y a pesar de todos los “no” que encontraba en el camino, se aventuró a recorrer Colombia y a conocer el mundo, “descubrí que quería viajar cuando me di cuenta de que había cientos de culturas con diferentes pensamientos y costumbres a la mía y que mi mente era tan estrecha que debía enriquecerla”.
Hoy, a sus 27 años, Lizeth es la fundadora del Club de las Mujeres que Viajan Solas por el Mundo, al que ya pertenecen más de 10.000 viajeras. El Club es una comunidad de mujeres en Facebook que además de ofrecer información útil sobre sitios turísticos, alojamiento, rutas de transporte, precios, comida y todos los consejos necesarios a la hora de comenzar un viaje, se ha convertido en un espacio de empoderamiento en el que se dejan los “peros” atrás y se le da la bienvenida al ¿Por qué no? “Conocer nuevas culturas, nuevos lugares y nuevas personas me ha ayudado a formar mi carácter, en este momento no soy ni la mitad de lo que quiero ser…cada día me doy cuenta de que lo realmente imposible es lo que no intentas y por eso incentivo a otras mujeres a viajar”.
Mujeres bloggueras, profesionales y principiantes viajeras de Colombia y el mundo, pertenecen a esta comunidad y juntas se han convertido en una red de apoyo en la que se generan videos motivacionales para invitar a otras mujeres a perder el miedo, encuentros de viajeras y próximamente conferencias en torno al hecho de ser mujeres y viajar solas “Celebro ser una mujer que viaja sola porque cada día aprendo que la felicidad no depende de alguien más, sino de mí misma y descubro que muchos de los estereotipos que nos enseñan son solo mitos”.
Un día Lizeth quiere ser mamá y contarles a sus hijos las historias de sus viajes, enseñarles que la vida no es una fila india con parámetros establecidos y que vivir viajando también es un proyecto de vida.